Honoo - Valencia

Súper rico , nos dieron un trago de cortesía (para mi nena sin licor obviamente

Ha sido una experiencia espectacular para los sentidos. Una pena que seamos de otra ciudad y no podamos repetir pronto. Pero son duda queda grabado en mis papilas gustativas. Laa camareras super correctas. Si tuviese que poner un pero sería la temperatura del local, he pasado frío.

Íbamos con la expectativas muy altas por lo bien que nos habían hablado y las reseñas que habíamos leído, y lo cierto, es que no salimos del todo contentas. Nos decantamos por el bao de costilla (buena combinación de ingredientes, pero la costilla algo seca y el steak tartar (muy rico, de los mejores platos de la noche . Continuamos con las brochetas de anguila y Wagyu, lo más decepcionante. Poca cantidad, para el precio. La de carne estaba seca, y costaba de masticar, quizás se les pasó un poco el punto. Pero bueno, la noche mejoró con las gambas en tempura. Exquisitas, el cacahuete le daba un toque crunchy y tenían gran sabor. Para terminar, optamos por el pastrami, el cual le puso la guinda perfecta a la cena, ya que fue lo que más nos gustó, y lo que recomendamos 100% si vais al local (carne tierna, buena cantidad, la ración es contundente, eso sí son 20€ . Para concluir, optamos por la torrija acompañada de helado de Baileys. Estaba caramelizada, mojadita, y el helado era delicioso. Mención especial a la camarera Lucía, que fue muy amable en todo momento. Nos hizo la cena mucho más agradable.

En un local pequeñito cerca del campo de fútbol del Valencia está HONOO, que no es un restaurante japonés al uso, siendo más parecido a una izakaya , con preparaciones a la plancha, buen material, poco lujo y buena cocina. Manda la carne, aunque puedes encontrar también platos de pescado, marisco o pollo (brochetas), pero haría hincapié en lo bien que tratan el producto, con cocciones muy justas que resaltan sabores. Impagable el plato de tuétano con vieiras y cecina...y muy buenos también el karaage de gambas y los usuzukuris. Cenamos muy bien...

No creo que aporte nada nuevo que otros comensales no hayan comentado ya, aún así, ahí va. Fuimos para una celebración y elegimos este restaurante por la calidad en la comida y, desde luego que fue un acierto. La calidad, fue espectacular, los sabores estaban tan bien elaborados y tan bien compensados unos con otros que fue un placer enorme cada plato. Sin duda, repetiremos. El trato de las chicas fue muy bueno y atento y, agradecimos la recomendación en el punto de la carne ya que, la queríamos pedir al punto, y nos recomendó al punto menos y, que gran acierto hacerla caso!! En cuanto a los postres, amo el dulce pero, en este caso la tarta de queso apenas tenia unas notas de dulzor pero estaba tan buena que no lo eché en falta en ningún momento. Sin duda, repetiremos más veces.