Cancino Cibeles. - Cuauhtémoc

Fui mis a cenar ahí, es la primera vez q voy y la verdad me fascinó. Es un lugar mediano, hay área de terraza en donde entre semana se puede fumar y en donde hay también una mesa comunal. El servicio es excelente, el mesero muy amable y simpático. Los precios son muy razonables. La pizza me pareció super rica, con la cantidad exacta de tomate y de muy muy buen tamaño. Pedimos Margarita y gorgonzola y pera, la cual estaba impresionante!! Deliciosa en realidad. Además pedimos una ensalada de granos, buena pero nada espectacular sinceramente. Es un lugar muy accesible y de calidad, además el lugar es lindo y la vista hacia la Cibeles le da un toque más cool al lugar.

Me encanta este lugar, es perfecto para toda ocasión: familia, amigos, negocios, etc. El lugar es muy acogedor y está en una de mis zonas favoritas de la cdmx. Cada que voy con mi familia no perdemos oportunidad para ir a cenar ahí. No pueden perderse una deliciosa pizza, ensalada, un bien vino o algunos de sus cócteles con mezcal.

Fuimos a comer con unos amigos recientemente y el lugar resulto ser una grata sorpresa, la atención fue perfecta, la comida deliciosa y el ambiente perfecto para pasar una velada rica. Mención especial a su pizza de pera y gorgonzola! Una delicia!

El lugar no es deslumbrante por su decoración, es más, está adecuado tipo obra negra, el mobiliario no es tampoco lujoso.El servicio es bueno, pero debes tener cuidado que la orden se la pidas a tu mesero, ya que los demás te oyen pero no pasan la orden.La comida resultó muy buena en tiempo, sabor y consistencia, las opciones son buenas e interesantes.Les falta tener algún contenedor portátil para mantener frías las bebidas, especialmente los vinos.Es un restaurant recomendable, yo en lo personal si regresaría.

El lugar es pequeño pero con personalidad, el servicio es atento y el menú simple pero suficiente. Probamos el carpaccio de res y resulta que lo sirven con queso rallado (primera vez que me lo sirven así), unos gajos de papa con papas en gajos acompañados con aderezo de chipotle (lo único salvable) y una pizza que parecía tener ketchup en lugar de salsa de tomate y cuya textura indicaba una evidente falta de cocción. Esto nos desalentó a probar algún postre. Totalmente prescindible.