Atalaya - CUAJIMALPA DE MORELOS

Soy un cliente habitual y en mis dos últimas visitas he notado una gran bajada en la calidad del servicio. Con toda la competencia que hay, no se pueden permitir ese tipo de errores.

El servicio es excelente, el ambiente es muy tranquilo y hay muchas mesas.

La comida es muy buena y el servicio también. Sin embargo, el olor a cigarro es terrible, cada vez que abren la puerta de la terraza entra humo y es muy incómodo. Merecería tener el aroma de la comida como protagonista. El sonido ambiente es demasiado alto, más adecuado para niños, deberían controlar el volumen de la música. Tal vez se deba a la selección, ya que en un momento hasta se escuchó un ruido como de una máquina vibrando, lo cual resultó molesto. A pesar de que los camareros fueron amables, no lograron solucionar estos problemas.

Es un extraordinario restaurante. Lo único que me parece fatal es su carta de vinos. Hay MUY pocas opciones y no son del todo atractivas. Un lugar tan bueno, merece una buena carta de vinos.

Se tardaron mil años con los desayunos, no siqueira estaba lleno el rest, y dejan aboerta la puerta de la terraza de fumar asi q se mete todo el olor a cigarro, trajeron el huevo crudo 3 veces!